El abandono se cierne sobre mi cuerpo y no soy más nada,
sólo un cuerpo huérfano,
sólo un cuerpo huérfano,
que no le pertenece a nadie.
Vagabundo que va pisando tierras desoladas,
ciudades derruidas que caen con su portentoso
ruido tras mis pies.
Errante de caminos desérticos
donde me confundo con lo grisáceo
donde me confundo con lo grisáceo
del panorama.
Abandono de tu amor que me ha hecho calzar
la carencia de sensaciones, el
mar muerto que se va pegando a mi piel.
2 comentarios:
me encanto el poema! un poco triste pero bonito, cuidate nena
besos
usted tiene estilo hasta para estrar triste
la melancolia tiene una sutileza y un garbo que pareceria que fuera Diva.
sí, la melancolia es una Gran señora con actitudes de diva.
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